La menopausia es una etapa más de la vida por la que pasaremos, estamos pasando o hemos pasado las mujeres.
Entre los 40 y 50 años el ciclo sexual femenino comienza a manifestar cierta irregularidad (premenopausia) hasta que desaparece la menstruación por completo (menopausia). Esta nueva etapa conlleva ciertos cambios producidos por la falta de estrógenos y que producen diferentes síntomas: ansiedad, sequedad vaginal, sofocos y sudoraciones, aumento de peso, cambio en la distribución de la grasa corporal (aumento de la grasa abdominal), etc.
Obesidad y menopausia
Hace unos meses la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia (AEEM) informaba que una de cada cuatro mujeres posmenopáusica (aquellas a las que hace más de un año que se les retiró la menstruación) es obesa. Es un dato preocupante dado que la obesidad es un factor de riesgo de diversas patologías (enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, hipertensión, etc.), además de poder causar cierta ansiedad o malestar por este cambio en el aspecto físico.
El aumento de peso a lo largo de esta etapa puede ser variable, dependiendo de cada mujer. Una de las causas más comunes es la disminución de la actividad física manteniendo la misma ingesta o incluso superándola. Si a la disminución de actividad física le añadimos la pérdida de masa muscular (el músculo requiere más energía que otros tejidos corporales), el aumento de peso es más rápido. Es una cuestión de balance: si ingieres más de lo que necesitas, ese aporte extra se acumula en forma de depósitos de grasa en el organismo. Y en esta nueva etapa suele hacerlo en la zona abdominal, haciendo aumentar nuestra barriguita.
Sobrepeso u obesidad
Mediante el peso y la altura o talla podemos calcular el Índice de Masa Corporal (IMC), método de referencia internacional. Si dividimos el peso actual entre nuestra altura (en metros al cuadrado: metros por metros) y la cifra que aparece está dentro del rango de 18.5 a 24.9, estaremos dentro de lo que se conoce como normopeso o peso adecuado. Si el resultado es superior a 24.9 pero inferior a 30, entramos en la clasificación de sobrepeso. Si el resultado es igual o superior a 30, entramos en la de obesidad (y a mayor grado de ésta, mayores complicaciones para la salud).
IMC = peso / talla (m²)
IMC |
Clasificación |
<18,5 |
Peso insuficiente |
18,5 – 24,9 |
Normopeso |
25 – 26,9 |
Sobrepeso grado I |
27 – 29,9 |
Sobrepeso grado II (preobesidad) |
30 – 34,9 |
Obesidad tipo I |
35 – 39,9 |
Obesidad tipo II |
40 – 49,9 |
Obesidad tipo III (mórbida) |
>50 |
Obesidad tipo IV (extrema) |
Fuente: SEEDO
Cómo prevenir el sobrepeso
Es preferible una intervención dietética y de hábitos (aumentar la actividad física, abandonar los malos hábitos, etc.) en la fase de la premenopausia, si observamos un aumento de peso. Y buscar las causas. Sería conveniente no experimentar con nuevas dietas ni con dietas con las que se pierde peso de forma rápida, lo adecuado es la pérdida de 0’5 a 1kg de peso por semana.
Si no hay complicaciones añadidas, un ligero sobrepeso se corrige con una adecuada alimentación y aumento de actividad física. Lo importante es no seguir aumentando el peso y abandonar los hábitos que perjudiquen la salud.
A mayor aumento de peso, mayores pequeños esfuerzos se requerirán: cambios permanentes en el estilo de vida, alimentación planificada y baja en energía (hipocalórica), practicar ejercicio físico y modificar la conducta.
Si por el contrario hay complicaciones añadidas: presencia de factores de riesgo para desarrollar ciertas enfermedades o presencia de enfermedades, la pérdida de exceso de peso será fundamental además de que disminuirá esos riesgos y mejorará el pronóstico de esas enfermedades.
Si no tenemos suficientes y sensatos conocimientos al respecto, mejor contar con el apoyo de un@ dietista-nutricionista. La mejor dieta es la que se adecúa a cada persona, y mejores resultados se obtendrán a mayor conocimiento de las circunstancias de cada una.
En todo caso hay que tener en cuenta que es necesario aportar las cantidades adecuadas de nutrientes, a través de una dieta variada y equilibrada, acompañada siempre de aumento de actividad física.
Reducir el exceso de peso mejorará la calidad de vida en esta nueva etapa.
L’augment d’aquesta «panxeta» ja es deixa notar en la premenopausa.
Canviar els hàbits no és una tasca fàcil: sí que ho és fer-ho un dia, de forma puntual; el què costa és la constància.
Cal millorar dos aspectes importants: l’exercici físic continuat i l’alimentació. De fet, tots entenem què passarà si aportem al cos més energia de la que «cremem»:.
Una part de la nostra salut és responsabilitat nostra i si en un moment de la vida ens costa mantenir els hàbits saludables per arribar a la vellesa en les millors condicions físiques, mentals i emocionals, sempre podem demanar consell a una professional que ens ajudi.
Val la pena tenir cura d’aquest cos que ens ha de portar pel món!!
Un article didàctic per la forma, instructiu pels coneixements que comparteix l’autora, i important pel tema que aborda. M’ha agradat el to tècnic i professional esgrimit per Fina Corredor, al mateix temps que m’ha agradat que l’autora piqui l’ullet a les lectores / lectors referint-se a »la barriguita». Picada d’ull que li atorga empatia a l’article i el fa proper i còmplice, amb serietat inclosa. Té tant mèrit arrancar un somriure i una complicitat sigui quan sigui… !
Trobo que és un document que ofereix informació i formació pràctica i responsable; de manera que convida a seguir els consells que reuneix, evidencia la influència de tot plegat en la salut i en la qualitat de vida, i evidencia la necessitat d’adreçar-se a una/un professional del sector per accedir a coneixements rigorosos.
És molt convenient tractar la qüestió de la menopausa -sovint oblidada-, la qual incumbeix a una franja de la població tan essencial en la societat.
Un article molt interessant, molt ben enfocat i molt clar. Felicito a Fina Corredor per saber fer arribar el seu missatge a totes les persones, sobretot a les dones menopàusiques, les quals els hi és un article molt interessant i recomanable la seva lectura ja que en poden treure molt de suc d’aquestes linies que ens ofereix la dietista. Enhorabona Fina !!