La semana pasada se celebró la feria Alimentaria 2016 en Barcelona. Es la feria más relevante de España y una de las más importantes de Europa. Se celebra cada dos años y en ella se congregan todas las empresas del sector de la alimentación en España, con especial presencia de los productores. También cuenta con numerosos expositores extranjeros que quieren buscar un distribuidor para sus productos en tierras españolas.
Tamaño de la Feria Alimentaria
Para que os hagáis una idea, puedes estar un día entero en la Feria y seguro que te faltarán stands por ver. El tamaño de Alimentaria es enorme y dentro de la misma feria encontrarás «subferias», como el pabellón donde encontrarás a los principales productores de vino y alcohol de España o el de productos para restauración.
La feria ocupa un total de 6 pabellones de la Fira de Barcelona que, para que puedas hacerte una idea del tamaño, cada pabellón tiene el tamaño de un hipermercado.
Innovación y tendencias en Alimentaria
El principal atractivo de esta feria para los dietistas-nutricionistas es conocer las últimas innovaciones y las tendencias del mercado durante los próximos meses. Los fabricantes presentan sus novedades y puedes tener la ocasión de hablar directamente con los máximos responsables de estos productos.
Desde Alimmenta, realizamos un sesión sobre Tendencias en Nutrición Saludable con una gran afluencia de público profesional.
¿Está cambiando algo dentro de la Industria Alimentaria?
Sin lugar a dudas la industria alimentaria tiene muy claro que los productos que elaboren y vendan en un futuro ya no tienen que ser apetecibles sino que deben aportar un beneficio a nuestra dieta. Este cambio es complejo cuando tu portafolio de productos (con el que pagas las facturas) y tu estructura industrial no están adaptados a la fabricación de productos saludables por lo que muchos de estos cambios se producen poco a poco.
Es destacable que la mitad del pabellón 1 (el más accesible de toda la feria) esté dedicado a los «Healthy Foods». En esta sección de la feria podemos encontrar snacks saludables como:
- Frutas liofilizadas con un gran sabor y textura que resultan perfectos para consumir cuando no tienes una fruta a mano. Os recomendamos de verdad probar los productos de Casual Fruit.
- Habas de guisantes horneadas de Snapea Crisps, propuesta premiada como uno de los productos más interesantes de la feria. De sabor y aspecto se parecen a los típicos «gusanitos» aunque su valor nutricional no tienen nada que ver. Contiene más de un 70 % de guisante y un 8 % de arroz, y es fuente de calcio y de hierro, con un alto nivel de fibra y proteína vegetal y menos de cien kilocalorías por ración.
- Todo tipo de super foods en diferentes formatos para ser consumidos principalmente como elementos de platos o ensaladas y darle también un toque diferente de sabor y aspecto.
- Verduras y frutas con mayor aporte de nutrientes del que normalmente tienen al modificar las condiciones de crecimiento. De esta forma tenemos «super brócolis» con un aporte adicional de vitaminas.
¿Innovación o revolución?
En un mercado tan maduro como la alimentación, no se intuye ninguna revolución. Las impresoras de comida y la carne creada en laboratorio quedan muy bien en las noticias pero estamos muy muy lejos para que algo revolucionario pueda llegar al mercado.
Vivimos tiempos de innovación incremental y lo que pudimos ver en Alimentaria fueron tres tipos de posicionamientos predominantes:
- Productos donde únicamente vale el sabor y donde su composición nutricional no es relevante (o no quieren que sea relevante). Aquí encontramos grandes cantidades de grasas y azúcares para hacer el producto más atractivo al paladar.
- Productos cuya propia naturaleza hacen que sean atractivos desde un punto de vista nutricional (frutos secos, kiwis, brócoli, algas…) y en los que gracias a la innovación agroalimentaria podemos hacerlos aún más densos nutricionalmente o presentarlos en formatos de consumo novedosos.
- Productos funcionales que combinan la innovación para crear productos totalmente nuevos en categorías ya existentes. Aquí estarían productos lácteos con innovadores fermentos o el uso de superalimentos como elemento funcional en un producto ya existente.
¿Qué opinas tú de las innovaciones que presenta la industria alimentaria?
Pues no me parece bien que desde un portal que creía serio y contrastado habléis estupendamente bien de los superalimentos, suplementos de todo tipo, «superbrócolis»???, etc…creo entender que la evidencia científica cada vez se aleja más del consejo de usar alimentos prometedores y con superpoderes. De verdad os digo que hacéis buenos artículos, serios y con base científica, pero otros son cuanto menos sospechosos y potencialmente desinformadores.
La industria alimenticia lo que intenta no es mejorar la salud de la población, no…es una gran empresa y lo que menos pretenden es mejorar la alimentación de las personas. Vender, vender y vender. A toda costa.
La única recomendación que se debe hacer es «consuma usted más alimentos de origen vegetal y menos animal, frescos y de temporada (y no unas frutas liofilizadas de no sé qué empresa..).
Es mi opinión. Un saludo.
Hola Miguel,
muchas gracias por tu opinión tan bien expresada. La recomendación de aumentar el consumo de vegetales no es incompatible con la innovación alimentaria, al menos en nuestra opinión. Los ejemplos que hemos puesto de productos presentados son precisamente vegetales y frutas en lo que se ha variado su cultivo o su proceso para presentarlo de una forma novedosa.
Es cierto que el concepto superfoods es puramente comercial y que ha llegado al consumidor. Pero aquí hablamos de alimentos con una gran cantidad de nutrientes en un volumen de consumo bajo. Y si estos alimentos los podemos consumir en nuestra dieta, son atractivos y nos permite ampliar los alimentos que consumos, no vemos ningún problema en su promoción. Muchos de los alimentos que comemos hoy en día no habían llegado a España hace poco más de 30 años. Alimentos comunes hoy en día como los kiwis o el aguacate no estaban disponibles en los comercios. Esta misma situación es posible que se produzca con algunas de estos nuevos alimentos, algunos de los cuales son ajenos a nuestra cultura alimentaria.
Por último, las empresas están formadas por personas y, a menos que sean psicópatas, su objetivo no es perjudicar la salud de las personas, incluídos sus familiares y amigos. El cambio hacia una industria alimentaria más saludable se está produciendo desde hace años aunque no todos los agentes lo hacen con la misma intensidad. Además de ser un cambio lento ya que modificar procesos industriales no es ni sencillo ni barato y la situación económica en España ha congelado las inversiones de estas empresas.
Creo que al igual que destacamos las cosas que hace mal la industria alimentaria, también debemos destacar aquellas cosas que hacen bien para conseguir que ésta avance hacia una versión saludable de la misma.
Esperamos leerte más por aquí. Un saludo!
Estupendo. No esperaba otra respuesta distinta a esta. Quizás me encendí al leer lo del «superbrócoli»…trabajo como DN en una consulta desde hacer años y llevo éste último escuchando demasiadas veces el asunto de los superalimentos. Paciencia, comprensión (por la cantidad de información/minuto que recibe la población sobre este asunto) y buen hacer es lo que nos queda a nuestro gremio.
Un saludo y buen trabajo!